Hipotiroidisimo: cómo interpretar un panel de resultados tiroideos
TiroidesSalud general

Hipotiroidisimo: cómo interpretar un panel de resultados tiroideos

Hipotiroidisimo: cómo interpretar un panel de resultados tiroideos

Octubre 1, 2019

Las enfermedades tiroideas tienen una prevalencia de hasta un 10% de la población española, y el hipotiroidismo y el síndrome del eutiroideo enfermo son de especial interés debido a su repercusión directa en la calidad de vida de los pacientes. Comprender la regulación de este sistema endocrino y las alternativas terapéuticas es crucial para tomar decisiones adecuadas en conjunto con tu médico. Una analítica de sangre puede desenmascarar la existencia de problemas de tiroides no detectados.

En este artículo aprenderás

  • Funcionamiento de la glándula tiroidea y acciones de las hormonas tiroideas.

  • Valores de laboratorio y cómo interpretar un panel tiroideo completo.

  • La importancia de disponer de todos los datos de laboratorio para evaluar el funcionamiento del tiroides, no solamente la hormona estimulante de la tiroides (TSH).

  • Diagnóstico y tratamiento del hipotiroidismo.

  • Consejos sobre suplementación y hábitos dietéticos para promover la salud del tiroides.

Funcionamiento del tiroides: un sistema endocrinológico complejo

El tiroides es una glándula endocrina situada en la parte inferior, anterior, del cuello, y es responsable de la formación y secreción de las hormonas tiroideas, al igual que la homeostasis del yodo. En circunstancias normales, el tiroides se encuentra bajo el comando del eje hipotálamo-hipófisis (TRH -> TSH -> glándula tiroidea), y produce dos tipos de hormonas:

  • un 90% de hormona tiroidea inactiva, denominada tiroxina o T4

  • y un 10% de hormona tiroidea activa, triyodotironina o T3

La hormona inactiva T4 es convertida en tejidos periféricos en hormona T3 activa, o bien, por un mecanismo alternativo, en hormona T3 inactiva (conocida como «T3 reversa» o T3r).

Un balance de las hormonas tiroideas es importante para un correcto funcionamiento metabólico. La T3 ejerce una función imprescindible en la regulación de la actividad de prácticamente todas las células nucleadas del cuerpo humano.

En el ámbito de la nutrición, la trascendencia del tiroides habitualmente se menciona en relación al control de la tasa metabólica basal (BMR): mayor consumo y oxidación de glucosa, ácidos grasos y, por extensión, pérdida de peso.

Es un mito común es que el hipotiroidismo es una causa directa del aumento de peso; en base a las publicaciones científicas, una función tiroidea disminuida predispone a un aumento de peso debido a una disminución de la tasa metabólica y actividad física, pero no así en condiciones eucalóricas (consumo calórico adecuado, ni más ni menos, para mantener tu peso).

Funciones menos conocidas de las hormonas tiroideas incluyen: control del gasto cardíaco y frecuencia cardíaca en reposo; control de la frecuencia respiratoria en reposo y promoción del suministro de oxígeno a los tejidos; desarrollo óseo después del nacimiento y remodelación ósea; estimulación del sistema nervioso, del estado de alerta y la vigilia; papel importante en la salud reproductiva, regulando tanto el ciclo ovulatorio como la espermatogénesis; regulación de otros órganos endocrinos y función pituitaria.

Síndrome del eutiroideo enfermo: «cansancio sin explicación»

Antes de explicar brevemente en qué consiste el hipotiroidismo objetivo, un diagnóstico que habitualmente requiere tratamiento farmacológico, nos centraremos en la enfermedad sistémica no tiroidea o «síndrome del eutiroideo enfermo». Dedicaremos mayor atención a este escenario, a medio camino entre respuesta fisiológica, adaptativa, y patología, debido a que su tratamiento no está claramente protocolizado y podría tratarse de un reto clínico para tu médico habitual; un especialista en endocrinología estará más familiarizado con diferentes aproximaciones terapéuticas.

El síndrome del eutiroideo enfermo se caracteriza por alteraciones en las concentraciones de hormonas tiroideas circulantes sin que exista afectación real a nivel del tiroides; las causas incluyen estrés fisiológico, enfermedades graves y traumatismos.

A nivel de laboratorio, encontramos una imagen clara (¡aunque confundible con hipotiroidismo central, de modo que la clínica debe orientarnos al diagnóstico!): un hallazgo constante es una disminución de la producción de T3 activa por inhibición de la 5´-monodesyodación de T4, unido siempre a aumento de la hormona T3 reversa (inactiva). La concentración total de T4 se encuentra en niveles normales o bajos en pacientes más graves, y la TSH puede ser normal o baja.

¡En el hipotiroidismo verdadero normalmente encontramos marcadas elevaciones de la TSH como clave diagnóstica! Entre las diversas causas descartamos aquí, pues no atañen realmente a la temática cubierta, el manejo de pacientes críticos (Unidad de Cuidados Intensivos), con traumatismos graves, infarto de miocardio, enfermedad renal crónica, cetoacidosis diabética, cirrosis, lesiones térmicas y sepsis; pero destacamos la inanición, anorexia nerviosa y la desnutrición calórico-proteica, que pueden darse fuera de un contexto hospitalario.

El tratamiento del síndrome del eutiroideo enfermo consiste en resolver el trastorno subyacente, y la reposición de hormonas tiroideas no es apropiada. Los pacientes que tienen concentraciones de TSH levemente elevadas deben controlarse a lo largo del tiempo para detectar hipotiroidismo manifiesto.

¡Un panel tiroideo completo nos proporciona toda la información necesaria para una correcta vigilancia y diagnóstico, por lo que, si detectamos un problema y tomamos los pasos necesarios para resolverlo, repetiremos un análisis de la función tiroidea en un periodo de seis a doce meses!

¡Ten en cuenta que un régimen abrupto y prolongado de pérdida de peso, con un déficit calórico dietético agresivo, va a ocasionar un descenso de la hormona T3 activa, en mayor o menor medida!

Esto es una respuesta fisiológica, evolutiva y adaptativa, que tiene como objetivo conservar energía, disminuir la producción de calor «innecesario» y reducir la actividad física involuntaria; «enlentecer» el metabolismo, expresado coloquialmente. La disminución de T3 y aumento de T3 reversa revierte rápidamente tras reintroducir una alimentación normocalórica. Durante un ayuno intermitente de corta duración (menos de 24 horas, como en el caso del Ramadán, por ejemplo) no se observan alteraciones significativas de las hormonas tiroideas. Si estamos considerando un ayuno más prolongado o una restricción calórica significativa con el objetivo de abordar terapéuticamente un sobrepeso importante, debemos hacer un balance de los numerosos beneficios que otorga la pérdida de peso, al igual que las potenciales complicaciones, en consorcio con nuestro médico habitual.

Hipotiroidismo verdadero

En el hipotiroidismo encontramos una falta de la acción de la hormona tiroidea en los tejidos del organismo. Las causas pueden estar asentadas en el propio tiroides (hipotiroidismo primario), en un 95% de los casos, y menos del 5% restante son de origen hipofisiario o hipotalámico.

A nivel mundial la causa más frecuente es el déficit de yodo, aunque la OMS considera España uno de los países con ingesta adecuada.

En nuestro medio, sin embargo, la etiología más frecuente es la autoinmunitaria (Tiroiditis de Hashimoto).

Si estás tomando fármacos como litio, amiodarona, antitiroideos o inhibidores de las tirosinacinasas, estos deben tenerse en cuenta como causa secundaria de hipotiroidismo.

En el adulto, la clínica es de comienzo lento y progresivo. Debuta con fatiga, letargia, estreñimiento, intolerancia al frío, miopatía, síndrome del túnel carpiano y trastornos menstruales, además de aumento de peso, piel seca y áspera, voz profunda y posible apnea del sueño.

Dado que la sintomatología es inespecífica, el diagnóstico se realiza en función de las pruebas de laboratorio. Sin embargo, para el diagnóstico diferencial podría ser necesaria la determinación de anticuerpos anti-peroxidasa tiroidea (anti-TPO) y anti-tiroglobulina (anti-TG), que son positivos en el 90-100% de las tiroiditis autoinmunes.

Adjuntamos una tabla que resume las alteraciones en el panel tiroideo de las diferentes enfermedades tiroideas.

Hipotiroidismo primario

  • TSH: Alta.

  • T4 libre: Baja.

  • T3 libre: Baja.

Hipotiroidismo subclínico

  • TSH: Alta.

  • T4 libre: Normal.

  • T3 libre: Normal.

Enfermedad sistémica no tiroidea (síndrome eutiroideo enfermo)

  • TSH: Baja/Normal.

  • T4 libre: Baja/Normal.

  • T3 libre: Baja y rT3 Alta

Hipotiroidismo central

  • TSH: Baja/Normal.

  • T4 libre: Baja.

  • T3 libre: Baja.

Hipertiroidismo subclínico

  • TSH: Baja.

  • T4 libre: Normal.

  • T3 libre: Normal.

Hipertiroidismo primario

  • TSH: Baja.

  • T4 libre: Alta.

  • T3 libre: Alta.

Hipertiroidismo central

  • TSH: Normal/Alta.

  • T4 libre: Alta.

  • T3 libre: Alta.

¿Suplementación y hábitos de vida saludables?

Una disminución de la función tiroidea puede ir asociada a un incremento del cortisol, la principal hormona del estrés del cuerpo, secretada por las glándulas suprarrenales. Una constante elevación del cortisol suprime el funcionamiento tiroideo, y provoca una cascada de eventos que conduce a resistencia a la insulina, aumento del apetito y aumento de tejido adiposo.

Para reducir el estrés crónico, considera optimizar alguno de estos puntos:

  1. Nutrición y ejercicio físico son la principal clave para mantener un metabolismo sano. Busca un programa de pérdida de peso y actividad física que puedas sostener a lo largo del tiempo. Para perder peso gradualmente, implementa un déficit calórico diario moderado (10 a 20%). Si no estás realizando ejercicio, una sencilla y breve rutina de ejercicios de fuerza/musculación, un aumento de tu actividad cardiovascular, o una combinación de ambos (por ejemplo 30 minutos de cada, 2 o 3 días a la semana, según tus capacidades físicas de partida) es suficiente para percibir beneficios.

  2. Mejora tu higiene de sueño para dormir por lo menos ocho horas, especialmente si tus niveles de TSH están elevados. La privación de sueño está altamente correlacionada con aumento de peso y disfunción metabólica.

  3. Limita el consumo de cafeína y alcohol.

  4. Explora técnicas como la meditación, yoga, ejercicios de respiración o la relajación muscular progresiva.

  5. En relación con la nutrición y una adecuada ingesta de minerales, el yodo es el principal nutriente requerido para la síntesis de hormonas tiroideas, seguido por el selenio. Asimismo, el hierro, la vitamina A y el zinc juegan un papel importante. En caso de una función tiroidea normal consume una dieta variada que incluya estos nutrientes y, si detectas insuficiencia en alguno de ellos, considera suplementación.

  6. Si padeces de hipotiroidismo incluye alimentos ricos en yodo, pescado y marisco, y alimentos vegetales ricos en antioxidantes. Evita un consumo excesivo de sal y de alimentos bociogénicos (coliflor, col, brócoli, rábano y colza, entre otros del género Brassica).

Autor: Tomás Duraj

Referencias

AVISO: Este artículo informativo está basado en las fuentes bibliográficas citadas a continuación y ha sido revisado por el Comité de Revisores de Melio. Todo el contenido es válido a la fecha de publicación, pero podría no incluir avances más recientes. Este blog se presenta exclusivamente con fines informativos y no constituye la práctica de Medicina, Enfermería u otros servicios profesionales de salud, incluida la prestación de asesoramiento médico, y por ende no constituye una relación médico-paciente. El uso de información o materiales vinculados desde este blog son bajo la responsabilidad del propio usuario. El contenido de este blog no pretende ser sustituto de consejo, diagnóstico o tratamiento médico.

Los enlaces dirigidos a páginas web pueden no estar disponibles por causas ajenas: agradeceremos que nos informe si cualquier referencia no está disponible para subsanar la situación.

Valdés, S., et al. (2017). "Population-based national prevalence of thyroid dysfunction in Spain and associated factors: Di@ bet. es study." 27(2): 156-166.

Armstrong, M. and A. Fingeret (2018). Physiology, Thyroid Function. StatPearls [Internet], StatPearls Publishing.

Basolo, A., et al. (2019). "Effects of short-term fasting and different overfeeding diets on thyroid hormones in healthy humans." (ja).

CARLSON, H. E., et al. (1977). "Alterations in basal and TRH-stimulated serum levels of thyrotropin, prolactin, and thyroid hormones in starved obese men." 45(4): 707-713.

Eastman, C. J. and M. B. Zimmermann (2018). The iodine deficiency disorders. Endotext [Internet], MDText. com, Inc.

Fox, C. S., et al. (2008). "Relations of thyroid function to body weight: cross-sectional and longitudinal observations in a community-based sample." 168(6): 587-592.

Gosi, S. K. Y. and V. V. Garla (2019). Subclinical Hypothyroidism. StatPearls [Internet], StatPearls Publishing.

Ganesan, K. and K. Wadud (2018). Euthyroid sick syndrome. StatPearls [Internet], StatPearls Publishing.

Artículos relacionados